El Museo Thyssen-Bornemisza presenta una exposición dedicada al pintor belga Paul Delvaux (1897-1994), un artista representado tanto en la colección permanente del Museo (Mujer ante el espejo, 1936) como en la colección Carmen Thyssen-Bornemisza (El viaducto, 1963).
Tras una primera etapa marcada por el expresionismo flamenco, Delvaux descubrió el surrealismo y experimentó la influencia de Magritte y Giorgio de Chirico.
El mundo de Delvaux tiene un inconfundible carácter onírico.
Sus figuras femeninas vagan como sonámbulas por escenarios nocturnos, ofreciendo a la mirada del espectador su desnudez a la vez fría y sensual.
Realizada en colaboración con el Musée d’Ixelles, esta exposición reúne más de medio centenar de obras del pintor, procedentes de colecciones públicas y privadas de Bélgica, y especialmente de la colección Ghêne.
En ella se recorren cinco grandes temas de la iconografía de Delvaux entre Eros y Tánatos: la Venus yacente; la obsesión por el Doble; las arquitecturas clásicas y las estaciones de ferrocarril; y finalmente la Danza de la muerte.
MUSEO THYSSEN-BORNEMISZA